Vuelve la Champions League con los partidos de vuelta de octavos de final. Gran partido apunta el Barça-Arsenal, aunque ambos equipos llegan mermados por las bajas. En los azulgranas, sensibles, por no decir más, en defensa, con sus dos pilares Puyol y Piqué fuera del once por lesión y sanción respectivamente. Por parte Gunner bajas también importantes con Song, Walcott y la duda de Van Persie, que ha entrado en la convocatoria a última hora.
Los dos equipos apuestan por un fútbol vistoso y de toque aunque los ingleses se enfrentan a su bestia negra de los últimos años en Champions. Y con el handicap de jugar fuera de casa donde el rendimiento en fútbol y competitividad baja bastante su nivel.
Vuelve también Cesc al Nou Camp y veremos si es la última vez que se enfrenta al Barça con la camiseta de los Gunners, pues tanto el Barça ansía recuperarle como el jugador regresar a la ciudad condal, morbo añadido por lo tanto. Fundamental la recuperación de Cesc para el Arsenal, pues es la manija absoluta en el esquema de Wenger y el creador junto a Nasri de su fútbol.
Si el Pep-Team juega a su mejor nivel, no tiene rival en los ingleses, que aunque siempre apuesta por un fútbol de toque y vistoso, el equipo de Wenger nos lleva acostumbrando ya hace años a que en los partidos importantes bajan mucho su rendimiento, quizás debido a la apuesta que hace siempre el francés por jugadores jóvenes, que sobrados de calidad suelen pagar en choques vitales su inexperiencia.
Con un resultado de 1-0 pasaría el Barça por el valor del gol de Villa en el Emirates, pero la clave del partido va a estar en el equipo que mantenga el balón, pues tanto catalanes como londinenses basan su juego en la posesión y el toque. Y sin el balón en su poder, ambos equipos sufren.
El Barça es el favorito y juega en casa, los de Wenger tienen la oportunidad de acabar con su bestia negra y su imagen de equipo tierno en los momentos importantes.
Empieza el ser o no ser, empieza la verdadera Copa de Europa.
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